No te importó si yo comía o sufría o se partía en dos mi corazón...*

Hace un tiempo venía muy angustiada pensando en que no tengo una canción para el momento que estoy viviendo.

Soy fiel creyente de que para todos los momentos de la vida hay una canción que describe, no exactamente aunque a veces si, la situación que uno vive, sea feliz o triste.

Yo, recien separada, no encontraba canción! Necesitaba algo que escuchar mientras veía fotos y lloraba, mientras veía su facebook y lloraba, mientras cocinaba y lloraba, mientras me bañaba y lloraba, etc. Para las separaciones la música es tan necesariaa como el aire, es más, la necesitas más que a la comida.
Estaba yo en la oscuridad hasta que, hace unos días, ví la luz.
Mi amor fraterno, mi querido hermano, me regaló un CD de Reggetón para el auto y ahora tengo la teoría de que mi separación se puede resumir históricamente en un collage de reggetones varios. Acá va la prueba:

1º momento:
"Ayer la vi por ahí tomando Queriendo morir llorando Quien le hizo eso a ella tan bella Que ahoga hoy sus sueños en esa botella. " (Don Omar, "Ayer la vi")

2º momento:
"Amor sabes que me estoy muriendo de dolor desde que te fuiste he perdido el control pero eso no quiere decir que seas tu la dueña de mi." (Chapa C, "Llorando por mi")

3º momento:
"Chau amor y que te vaya bien y no llores que de nada servira Chau amor espera otro tren porque el mio no tiene cupo ya." (Daddy Yankee, "Chau amor")

¡Genial!

Quiero aprovechar la ocasión para declarar que yo, Lucía Inagaki Aprá, creo fervientemente que el reggeton es lo más; que es profundo, sincero, divertido y que vino para quedarse. Si tuviera un poco de autoridad y seriedad (aclaro que ninguna de las dos se presentan en mi cuerpito) diría: si para Lugones el Martín Fierro es nuestra novela épica nacional, el Reggeton es nuestra música continental.
Nos vemos en el recital de Calle 13.
Gracias.

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* "Si alguna vez", La Factoria.